Vamos a dejar algo claro, la Operación Bikini es un mito. Para lucir tu cuerpo en el verano solo necesitas eso: tu cuerpo y la seguridad para sentirte cómoda en él. Ahora, a la par de esta filosofía, es cierto que a todos necesitamos un cuerpo sano. De ahí que las dietas y ejercicios ocupen un papel protagónico en las resoluciones de cada año nuevo.
Lo ideal es consultar primero algún especialista en nutrición, para evitar poner nuestro cuerpo bajo estrés innecesario. Un plan nutricional adecuado permitirá no solo perder peso, sino también evitar el temido efecto rebote. Además, es importante tener en cuenta que ejercicios y dietas deben ir de la mano con horas de descanso.
Otro elemento clave es adoptar las rutinas que más se correspondan con nuestras necesidades y metas. Ningún cuerpo se parece a otro y lo que para algún conocido puede funcionar, tal vez para ti no. Además, es importante mantener expectativas realistas y no dejarse llevar por todo lo que se ve en las redes sociales, donde los influencers de fitness tienden a mostrar solo la parte “bonita” de sus rutinas.
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Dieta: un medio para mejorar el rendimiento físico
Si bien existen millones de dietas que proclaman ser súper efectivas, lo primero a tener es que no son una camisa de fuerza. Una alimentación balanceada y saludable mejorará la condición física. Además, evitará la aparición de enfermedades crónicas como diabetes, accidentes cerebrovasculares, cáncer y padecimientos cardiacos.
Una buena forma de perder peso de forma segura y saludable y de tonificar también los músculos, es realizar una dieta de déficit calórico. Esta se basa en reducir las calorías en lo que comemos pero, ojo, lleva un cálculo preciso e individual para no generar desgastes y fatigas.
Aunque se repite hasta el cansancio, otra dieta valiosa es la basada en frutas y vegetales como oposición al azúcar refinado, las grasas, los fritos y los alimentos procesados. No se trata de privarse por completo de las “comidas basura”, sino que sean un gusto de un día y no parte constante de nuestras rutinas alimenticias.