Demi Moore fue, posiblemente, la estrella que más brillo en la reciente edición de los Golden Globes. Ello, no solo por su premio, sino por los que representó para la actriz y ¿por qué no? para la industria del entretenimiento. «Estoy en shock. Llevo mucho tiempo haciendo esto, más de 45 años, y esta es la primera vez que gano algo como actriz».
Con estas palabras Moore recibió este domingo el galardón de mejor intérprete femenina de una película musical o de comedia en la 82.ª edición de los Golden Globes, uno de los premios más importantes del mundo cinematográfico.
«Hace 30 años un productor me dijo que era una actriz de palomitas de maíz, lo que en aquel momento no me hacía merecedora de este premio. Significaba que podía hacer películas exitosas y que recaudaran mucho dinero, pero que no podía ser reconocida (por mi talento). Y yo lo creí», destacó en su discurso una actriz, que siempre disfrutó de la admiración del público, y que hoy la academia reivindica.
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Demi Moore: The Substance
«Estaba en un punto muy bajo cuando recibí este guión mágico, audaz, valiente, rompedor, absolutamente loco titulado The Substance. Y el universo me dijo: ‘No, aún no has acabado”, expresó Moore respecto a una película que, definitivamente, representa un antes y un después en su trayectoria profesional.
Las hijas de la actriz, Rumer, Scout y Tallulah Willis, compartieron un video en sus redes sociales. En el clip, junto a un grupo de amigos y familiares, desbordan emoción y alegría mientras Kerry Washington y Andrew Garfield presentaban el premio. La publicación en Instagram fue acompañada con la leyenda: “Lo logró”.
“Hoy celebro esto como un marcador de mi integridad, del amor que me impulsa y del regalo de hacer algo que amo y ser recordada de que sí pertenezco”. Así cerró la estrella de cine uno de los discursos más memorables de una noche cargada de simbolismo
