Donald Trump ha tomado medidas legales para cambiar la jurisdicción de su caso penal desde el estado de Nueva York a un tribunal federal en Manhattan, buscando retrasar su próxima sentencia debido a su condena por 34 cargos de falsificación de registros comerciales.
La demanda presentada este jueves por su equipo legal, sostiene que Trump no debería ser sentenciado mientras se resuelve el litigio sobre el traslado a un tribunal federal. Argumentando que los daños actuales y futuros a la presidencia son incalculables si continúa el enjuiciamiento en Nueva York. Sumado a esto, la defensa del republicano subrayó que el juez Juan Merchan debe pronunciarse a principios del próximo mes sobre la moción para posponer la sentencia, actualmente programada para el 18 de septiembre.
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Donald Trump apela a la inmunidad presidencial
Los abogados de Trump han hecho especial hincapié en la relevancia de la decisión reciente de la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. La cual establece una amplia inmunidad para los actos oficiales de un presidente. A partir de esta jurisprudencia, plantearon la necesidad de una revisión federal del caso actual en Nueva York. Resaltando que Trump tiene derecho a una defensa completa basada en la inmunidad presidencial reconocida por el máximo tribunal.
A pesar de que una demanda similar fue rechazada anteriormente por un juez federal, Trump insiste en su derecho a una revisión federal del caso. Argumentando que la doctrina de inmunidad presidencial protege sus acciones como presidente y debe resultar en la desestimación de los cargos en su contra.
El proceso legal sigue desarrollándose, con el juez Merchan pronunciándose próximamente sobre la solicitud de traslado a un tribunal federal mientras se espera que dictamine la sentencia contra Trump en septiembre. La incertidumbre legal sigue envolviendo este caso. En tanto, Trump lucha por cambiar el curso de su sentencia y proteger su posición política de cara a las elecciones presidenciales de 2024.