El expresidente Donald Trump regresó a la campaña electoral por primera vez desde que comenzó su juicio penal en Nueva York el mes pasado. Aprovechando su único día libre de la semana, este miércoles organizó mítines en Wisconsin y Michigan, dos estados cruciales en la carrera hacia la Casa Blanca. Sin embargo, a pesar de la insistencia de Trump y su campaña en que el expresidente aprovecharía cada momento libre fuera de la sala del tribunal, ha pasado gran parte de su tiempo asistiendo a actos de recaudación de fondos y organizando reuniones en lugar de eventos políticos.
Ante esta situación, Trump expresó su frustración por no poder participar activamente en la campaña debido a su presencia requerida en el tribunal. Así mismo, algunas personas cercanas a él se sorprendieron por la falta de actividades de campaña. Especialmente teniendo en cuenta que las elecciones generales están a pocos meses de distancia.
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Donald Trump: Decido a regresar a la Casa Blanca
En medio de este contexto, las encuestas muestran una competencia reñida en Michigan, Wisconsin y Pensilvania, estados clave en la carrera electoral. En tanto, el equipo de Trump ha contratado directores estatales con el objetivo de atraer a votantes críticos de la clase trabajadora. Así como a votantes árabes estadounidenses descontentos con la gestión de Biden en la guerra entre Israel y Hamas.
Su estrategia se basa en repetir su éxito con los votantes de clase trabajadora que lo ayudaron en su victoria de 2016. Por lo que la campaña de Trump planea establecer una organización robusta de voluntarios y confiar en la infraestructura del Comité Nacional Republicano. Sin embargo, los republicanos han tardado en invertir en campos de batalla clave y están rezagados en la recaudación de fondos en comparación con los demócratas.
Conscientes de que no podrán competir con las grandes arcas de campaña de Biden, la estrategia de la campaña de Trump se basa en persuadir a los votantes externos para que lo apoyen. Por estos motivos, en sus mítines, Trump se centrará en temas como política exterior, crimen, inmigración y economía. Destacando así, las supuestas vulnerabilidades de Biden en estos aspectos.
