La estrategia de campaña de Donald Trump le está ganando terreno en sectores que históricamente habían sido 100 por ciento afines a los demócratas. No solo las comunidades negra y latina, en el sector de las tecnologías también el expresidente ha logrado hacerse de apoyos valiosos. Y aunque muchos de los jugadores de peso en el universo de Sillycon Valley se habían mantenido retiscentes a Trump, en el marco de la Convención Nacional Republicana dieron un giro de 360 grados para ofrecerle su apoyo político y sus millones también.
El pasado fin de semana Elon Musk expresó su respaldo al candidato presidencial. Además se comprometió a realizar donaciones de 45 millones de dólares por mes durante los próximos 3 meses a la campaña de Trump. Fue este quizá el paso inicial para que otros magnates de las tecnologías se sumaran abiertamente a la legión de seguidores de MAGA. Ahora nombres como David Sacks, Doug Leone, Joe Lonsdale, Marc Andreessen y Ben Horowitz, han endorsado la carrera de Donald Trump.
Sin embargo este viraje en la postura de los millonarios de las tecnologías no parece ir mucho más allá de una “defensa” de sus propios intereses. La gestión de Biden ha sido bastante punitiva con las leyes antimonopolio así como con los activos digitales. En cambio, la elección de compañero de fórmula de Trump, ha sentado muy bien entre la comunidad tecnológica. Después de todo el senador JD Vance es reconocido por sus relaciones con líderes tecnológicos y de capital de riesgo.
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Donald Trump sumó apoyo a su campaña
Anna Massoglia, analista del grupo OpenSecrets abordó dicho contexto. “Esto no se trata de que los grandes jugadores del mundo de las tecnologías que tradicionalmente se han inclinado por los demócratas están cambiando de bando. En su lugar lo que estamos viendo es una facción consevadora antisistema que comienza a volverse más políticamente activa”.
Según la experta, es muy pronto para saber si este escenario se mantendrá o si se trata solo de un cambio de postura temporal. Lo cierto es que los republicanos están aprovechando el impulso. No obstante, no hay señales de que las plataformas tecnológicas líderes, Meta, Google y Apple, o sus líderes se vayan a inclinar por la campaña de Trump.
Algo sin dudas hay que reconocer: la campaña de Trump sabe jugar sus piezas. No solo tiene en la mira una visión pro negocios para impulsar la innovación y las empresas. También se convirtió en la primera campaña presidencial en aceptar donaciones en criptomonedas, evidenciando su interés por los activos digitales, algo que transmite seguridad a los magnates del sector.
