Donald Trump sabe que se encuentra en un momento inmejorable de su campaña. Con la debacle de Joe Biden y sus recientes victorias en Estados Unidos, no es de extrañar que el magnate aproveche el contexto actual para consolidar su capital político de cara a las presidenciales de noviembre próximo.
El republicano celebró el pasado 14 de junio su 78 cumpleaños. Aunque apenas lo separan tres años del actual presidente, a los ojos de la opinión pública la diferencia parece abismal, y no es para menos. Trump sabe moverse como pez en el agua entre las cámaras, la gente y las polémicas. Su tono confrontativo y su manejo de la comunicación virtual lo representan como alguien mucho más «joven» de lo que realmente es.
“Los votantes registrados que vieron el debate del jueves dicen que Trump tuvo un mejor desempeño, en proporción del 67% frente al 33%. Antes del debate, los mismos votantes decían que esperaban que Trump tuviera una mejor actuación que Biden, en porcentajes 55% a 45%”, informó CNN. Otras cifras demostraron que un 5 por ciento de los encuestados señaló que ha cambiado de opinión respecto a por quién votar, un 14% que lo está reconsiderando y un 81% sigue fiel a sus ideas. Estos fueron los números que arrojó su cara a cara con Biden.
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Donald Trump a la espera
«Trump y sus aliados han disfrutado esta semana del protagonismo ampliado de Biden, y el expresidente ha tomado la rara decisión de pasar desapercibido en su club de Nueva Jersey y permitir que Biden sea el protagonista. Trump no tiene actos públicos en su agenda, y su campaña sorprendió a algunos ayudantes y asesores diciéndoles que disfrutaran de la festividad del 4 de julio».
CNN reseña así la inteligencia de Trump y de su equipo, conscientes de que cada titular que acapara Biden representa una fiasco para su imagen y, por consiguiente, una ventaja para los republicanos. De hecho, no es de extrañar que este ‘segundo plano’ estratégico se rompa con bombos y platillos el próximo 15 de julio, cuando inicie la convención republicana en Milwaukee.
La Convención Nacional Republicana debe ser el escenario ideal para oficializar la candidatura presencial de Donald Trump, pero sobre todo para conocer a su compañero de fórmula, un nombre que tanta curiosidad despierta entre los votantes.
