Elon Musk es, posiblemente, uno de los hombres más polémicos de la actualidad. Ya sea por sus millones o por sus declaraciones, lo cierto es que a pocos deja indiferente el magnate. Sobre todo desde que adquirió la red social X, antes Twitter. Su última “querella” está relacionada con el gobierno de Brasil.
El Supremo Tribunal Federal de esa nación ordenó este domingo investigar al billonario. Eso, tras sus ataques a la Justicia brasileña y su amenaza de no obedecer determinaciones para bloquear cuentas en la red social. “Las investigaciones por los supuestos delitos de «manipulación criminal y dolosa» de la plataforma X y obstrucción a la Justicia fueron ordenadas por el magistrado Alexandre de Moraes, uno de los miembros de la Corte Suprema y responsable por un proceso sobre el uso de las redes sociales para la difusión de noticias falsas y ataques a la democracia”, reseña DW.
No es la primera vez que X es cuestionado por autoridades nacionales o regionales. En diciembre del pasado año la Unión Europea abrió una investigación formal sobre X por sus prácticas de moderación de contenido. Algo que, de trascender, podría conducir a multas elevadas u otras sanciones, según una nueva ley de la UE.
🇧🇷 El ministro de la Corte Suprema Alexandre de Moraes ordenó la inclusión del multimillonario Elon Musk entre los investigados en la causa Milicia Digital, que investiga grupos criminales que difunden informaciones falsas en redes sociales con el fin de afectar procesos… pic.twitter.com/WTXdUng2T3
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) April 8, 2024
Te puede interesar: Elon Musk cayó del primer puesto como persona más rica del mundo
Elon Musk y las investigaciones sobre X
Musk, CEO de Tesla y SpaceX, se adueñó de Twitter en 2022. Eso, después de una oferta de USD 44 mil millones y un litigio en los tribunales de Delaware, donde la red social demandó al magnate para hacer cumplir la oferta vinculante. Más tarde, en relación a la compra, afirmó que lo hizo para “salvarlo” de lo que él denomina un “virus mental”, en referencia a lo que considera pensamiento de izquierdas o “woke”.
El enigmático empresario se autodenomina como un «absolutista de la libertad de expresión». Sin embargo, una de sus más recientes polémicas estuvo vinculada con la censura. Eso, cuando Don Lemon anunció que su acuerdo con Elon Musk se desmoronó, después de una entrevista que le realizara. De hecho, Musk ha sido criticado en el pasado por limitar el discurso de los críticos y respaldar teorías de conspiración y retórica extremista.