Tras el anuncio del presidente Joe Biden sobre su retiro de la carrera presidencial de 2024, la atención de los partidos políticos rápidamente se centró en posibles sucesores demócratas. En este contexto, el nombre del gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, comenzó a destacar como una opción a considerar.
A sus 51 años, Shapiro gobierna un estado clave en el campo de batalla electoral, convirtiéndolo en una figura cada vez más destacada dentro de su partido. Recientemente, el secretario de Transporte Pete Buttigieg visitó Pensilvania junto a Shapiro, momento en el cual el gobernador enfrentó una serie de preguntas sobre sus aspiraciones presidenciales para 2028.
Aunque Shapiro ha dejado claro que no tiene planes de postularse a la presidencia, la especulación sobre su futuro político político sigue creciendo. Incluso se ha mencionado su posible candidatura a la vicepresidencia junto a la actual vicepresidenta Kamala Harris, en caso de que ella fuera la nominada demócrata.
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Partido republicano mantiene en la mira a Josh Shapiro
Shapiro ha sido elogiado por su desempeño como gobernador y su capacidad para llegar a acuerdos bipartidistas. Su origen judío también podría atraer votantes judeocristianos que buscan una alternativa a la retórica del expresidente Trump.
Encuestas recientes muestran que Shapiro podría obtener mejores resultados que Biden en varios estados indecisos, incluido Pensilvania. De hecho, la campaña de Donald Trump ha estado «prestando especial atención» al gobernador como posible compañero de fórmula. Más allá de los demócratas, Shapiro también atrae miradas desde el otro lado del pasillo político. Figuras republicanas como el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, han elogiado al mandatario pensilvaniano.
Con un índice de aprobación del 64% en su primer mandato, Shapiro parece posicionarse como un activo valioso para los demócratas, que buscan retener Pensilvania, un estado clave para ganar la Casa Blanca. Sin embargo, el propio Shapiro ha dejado claro que su enfoque está en servir a los habitantes de su estado, descartando por ahora cualquier aspiración presidencial.