Nicolás Maduro sigue apostando a que el tiempo y la represión sean sus aliados. El dictador y su cúpula parecen creer que el desgaste de tantas jornadas de protestas y el desmantelamiento de la oposición pueden llevarlo hasta enero, cuando — de manera oficial — comenzaría un nuevo mandato en Venezuela.
Respecto al aislamiento, tampoco parece demasiado preocupante. De hecho, él ya sabe lo que es sobrevivir al margen de la comunidad internacional. Aunque eso signifique que los venezolanos sufran las consecuencias con crisis de todo tipo y con el aumento de los índices de pobreza en la nación.
En este contexto, las esperanzas de la mayoría están sobre la líder opositora María Corina Machado. Ella sabe que la resistencia es fundamental en este contexto. Como también lo es el respaldo de todo el mundo y sobre todo, de las fuerzas militares del país, que deben garantizar que se respete la voluntad del pueblo.
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Estados Unidos respalda a una Venezuela libre
Este jueves durante una reunión organizada por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en paralelo a las sesiones de la Asamblea General de la ONU, se abordó la crisis actual en tierras bolivarianas. En este contexto, el funcionario fue categórico al respecto. “Mantener presión colectiva en los meses previos a la investidura presidencial en enero es crucial”.
Asimismo, instó a que “el régimen de Maduro frene su represión en contra de quienes protestaron pacíficamente, de sus oponentes políticos y que libere inmediata e incondicionalmente a los que han sido encarcelados arbitrariamente, incluyendo a menores de edad”.
Esta no es la primera vez que Estados Unidos se pronuncia al respecto. De igual forma lo han hecho varios países del orbe, ente ellos Chile, Argentina y España, donde -precisamente- se encuentra exiliado quien fuera el candidato opositor a la presidencia de Venezuela, Edmundo González.
