Este jueves, una audiencia en el Capitolio de Estados Unidos se convirtió en un verdadero campo de confrontación, cuando varios funcionarios se enfrascaron en un acalorado debate. El incidente, protagonizado por Jasmine Crockett, tuvo lugar durante una reunión del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes. El encuentro fue convocada expresamente para tratar el presunto desacato del fiscal general Merrick Garland, por negarse a cumplir una citación.
Las tensiones se acaloraron cuando la representante de Georgia, Marjorie Taylor Greene, y la representante de Texas, Jasmine Crockett, se enzarzaron en una disputa personal. Greene, visiblemente molesta, lanzó un insulto dirigido a Crockett, cuestionando su apariencia debido a sus pestañas postizas. «No creo que sepas para qué estamos aquí. Creo que tus pestañas postizas están arruinando lo que estás leyendo», le dijo Greene a Crockett.
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Jasmine Crockett no se quedó en silencio
El ambiente se intensificó rápidamente, pero en lugar de disculparse, Greene se mantuvo firme en su postura. Respecto a ello, otros legisladores, incluyendo la representante Alexandria Ocasio-Cortez, condenaron enérgicamente las palabras de Greene como inaceptables. Mientras que el presidente del Comité de Supervisión, James Comer, intervino y determinó que los comentarios de Greene no violaban las reglas de la Cámara, lo cual generó aún más controversia.
Crockett, por su parte, respondió a Greene con una pregunta hipotética sobre cómo se trataría un ataque personal basado en la apariencia física de alguien en el comité. Esta pregunta provocó un nuevo estallido de indignación y desencadenó un prolongado intercambio de acusaciones.
El enfrentamiento interrumpió la reunión durante casi una hora, dejando a los legisladores atónitos y desviando la atención de los asuntos en discusión. Al final, el comité votó a favor de recomendar que se culpara a Garland por desacato al Congreso. Sin embargo, esta resolución aún debe ser presentada ante el pleno de la Cámara para su aprobación final.