El Departamento de Justicia de Estados Unidos y más de una docena de estados presentaron una demanda antimonopolio sin precedentes contra Apple. Este recurso es en un intento por frenar el dominio del gigante tecnológico en el mercado de los teléfonos inteligentes.
La demanda, presentada en el Tribunal de Distrito de Nueva Jersey, acusa a Apple de violar la ley federal antimonopolio, al mantener un control monopolístico sobre los teléfonos inteligentes y aprovecharse de su posición dominante.
De esta manera, el Gobierno alegó que Apple utiliza prácticas restrictivas en sus tiendas de aplicaciones, imponiendo altas tarifas y adoptando un enfoque de «jardín amurallado», que limita la competencia y perjudica a los consumidores.
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¿Qué otras acusaciones sostiene Estados Unidos contra Apple?
La compañía es acusada de otorgar beneficios preferenciales a sus propios productos, obstaculizando la innovación y bloqueando el acceso de nuevas aplicaciones y servicios en su sistema operativo iOS. Además, Apple es señalada por ejercer un control sobre el hardware de sus dispositivos. Eso, al ofrecer experiencias superiores e imponer una comisión del 30% en las ventas a través de su tienda de aplicaciones.
Por otra parte, el Departamento de Justicia sostiene que la empresa ha extraído más dinero de consumidores, desarrolladores, creadores de contenido, artistas, editores y pequeñas empresas, utilizando de manera ilegal su poder de monopolio.
La compañía negó todas las acusaciones. Además, declaró que defenderá su posición enérgicamente. Sin embargo, la acusación podría tener un impacto significativo en el precio de las acciones de Apple. Algo que obligaría a la empresa a realizar cambios en sus políticas y prácticas comerciales.
Este caso se suma a los esfuerzos de la administración de Joe Biden por responsabilizar a las grandes empresas tecnológicas bajo las leyes antimonopolio. La demanda podría tener un impacto significativo en el precio de las acciones de Apple y forzar cambios en sus políticas y estrategias comerciales.