La presión arterial elevada o hipertensión arterial es un problema de salud significativo en la población mundial. Es uno de los factores de riesgo más importantes que puede conducir a enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Existen varios elementos que influyen en nuestra presión sanguínea, incluyendo nuestros propios genes Además, enfermedades renales, ciertos medicamentos y un estilo de vida poco saludable, pueden contribuir a la hipertensión.
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Para la mayoría de las personas, los factores relacionados con el estilo de vida desempeñan el mayor papel en este sentido. Pueden provocar un aumento o disminución de nuestra presión arterial, provocando problemas al organismo. Afortunadamente, ciertos cambios en nuestro día a día pueden ayudar a controlar este asunto.
Aquí te presentamos siete consejos prácticos de estilo de vida para bajar la presión arterial:
- Mantener un Peso Saludable: El sobrepeso puede aumentar significativamente el riesgo de hipertensión arterial. Por tanto, mantener un peso corporal saludable es uno de los factores más importantes para controlar nuestra presión arterial. Mientras se aumenta de peso, también lo hace el ritmo de trabajo del corazón para cumplir sus funciones. Con este aumento, también lo hace la presión arterial. Perder incluso una pequeña cantidad de peso si tienes sobrepeso u obesidad puede ayudar a reducirla. Es necesario quemar más calorías de las que consumimos y tener un esquema que se pueda mantener en el tiempo a largo plazo.
- Adoptar una Dieta Equilibrada: Incorpora a tu dieta el consumo de alimentos ricos en potasio y bajos en sodio. Frutas, verduras, granos enteros y lácteos bajos en grasa son excelentes opciones. Evita el consumo de alimentos procesados y reduce el consumo de sal. Así se garantiza la obtención de una variedad de nutrientes beneficiosos para la salud. Además, se ayuda a mantener el equilibrio energético y la presión arterial en niveles saludables.
- Realizar Ejercicio Físico Regularmente: Es una realidad demostrable que la actividad física regular es muy beneficiosa para la salud. Eso incluye, por supuesto, un efecto positivo sobre la presión arterial, debido a que aumenta la fuerza del corazón. Caminar, nadar o andar en bicicleta, puede reducir significativamente la presión arterial. Especialistas recomiendan que realicemos unos 150 minutos semanales de ejercicio físico moderado dentro de nuestro estilo de vida. Si aumentamos los niveles por encima de ese tiempo, los resultados serán aún más favorables.
- Limitar el Consumo de Alcohol: El alcohol en grandes cantidades puede elevar la presión arterial. Limitar su consumo a las cantidades recomendadas es muy beneficioso para la salud. Se estima que lo máximo serían unos 100 gramos de alcohol semanal, es decir, una bebida al día para mujeres y dos para los hombres, como promedio
- No Fumar: Cada cigarrillo que fumas eleva temporalmente tu presión arterial. Fumar causa acumulación de grasa en las paredes de las arterias y causar obstrucción en las mismas. Dicha situación no solo puede ser causa de hipertensión arterial, sino que aumenta el riesgo de infarto cardíaco cerebral. Dejar de fumar y mejorar tu estilo de vida ayuda a tu presión arterial a volver a la normalidad y mejora tu salud general.
- Reducir el Estrés: El estrés crónico puede ser un contribuyente importante a la hipertensión arterial. Actualmente, esta es una realidad constante en el estilo de vida de las personas. Pero reducirlo es vital para mejorar la salud general del organismo. Emplear técnicas de relajación como la meditación, el yoga o ejercicios de respiración profunda pueden ayudar a reducir el estrés y llevar una vida más saludable.
- Controlar Regularmente tu Presión Arterial: Supervisar continuamente tu presión arterial puede ayudarte a tomar medidas en caso de que empiece a elevarse. Compra un equipo para ello o visita regularmente a tu médico para darle seguimiento. Detectar una posible hipertensión arterial a tiempo es importante para contrarrestar sus efectos negativos.
Siguiendo estos consejos, no solo puedes reducir tu presión arterial, sino también mejorar tu salud general. Recuerda, siempre es aconsejable consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en tu estilo de vida, especialmente si tienes condiciones preexistentes.
