La pasada semana una noticia ocupó los titulares del mundo en relación al ajedrez. Faustino Oro, un argentino de diez años, derrotó en un partido en línea al noruego Magnus Carlsen, considerado por muchos como uno de los mejores ajedrecistas de la actualidad.
“Niño prodigio” o “el Messi del ajedrez” fueron algunos de los calificativos para referirse al jovencito latinoamericano, quien desde hace algunos meses reside en Barcelona, según refiere una nota del diario deportivo Marca. La propia publicación explica que Faustino es el jugador más joven de la historia en llegar a Maestro Fide y en haber jugado un Mundial absoluto. “En junio de 2023, Faustino Oro se convirtió en el jugador más joven de la historia en superar la barrera de los 2300 de rating”.
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Faustino Oro y sus objetivos en el ajedrez
“No había visto absolutamente nada igual nunca. Por los resultados que tiene, por el golpe de vista, el talento que muestra, es único y comparable con muy poca gente a nivel mundial”, dijo David Martínez (Divis), entrenador y comentarista en Chess.com.
Pero, más allá de los elogios, el “niño prodigio” parece tener claro su camino en la vida, pese a su corta edad. Eso, de acuerdo con las declaraciones que ofreció a la cadena CNN, en relación a sus objetivos. “Me pienso dedicar a esto, si puedo (…) Mi sueño es ser campeón mundial”, expresó seguro ante las cámaras, donde también confirmó que le dedica alrededor de cinco horas diarias a la preparación.