El conflicto entre Israel y Palestina ha opacado el resto de los escenarios bélicos que hoy enfrenta el mundo. No obstante, y tras más de dos años, Rusia y Ucrania aún se enfrentan. Y, lo que muchos vaticinaron como una victoria clara del Kremlin, no se ha cumplido hasta ahora.
Rusia ha perdido alrededor de 50 000 soldados desde que Vladimir Putin decidió invadir a su vecino, de acuerdo con una investigación publicada por BBC. Moscú no ha confirmado la información y mantiene reservas en las cifras de los decesos de sus soldados. No obstante, lo cierto es que los números de BBC no son descabellados para varios analistas.
En este sentido, imágenes satelitales exclusivas obtenidas por CNN evidencian a esta hora un panorama nada positivo para el e***to a***sor. Las mismas muestran tres aviones rusos destruidos y edificios dañados en la base aérea de Belbek, en la ciudad portuaria ocupada de Sebastopol, este miércoles.
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Ucrania resiste ante Rusia
«Aunque Moscú parece llevar la delantera en su campaña terrestre más recientemente, las fuerzas de Kyiv han cosechado éxitos sostenidos atacando la flota rusa del mar Negro, ya sea con misiles o con drones», aclara CNN. La cadena noticiosa también explica que más de 20 buques de guerra rusos han quedado inutilizados o han sido destruidos. Es decir, un tercio de toda la flota. «Aunque Ucrania carece prácticamente de armada propia, la innovación tecnológica, la audacia y la incompetencia rusa le han dado ventaja en gran parte del mar Negro», advirtió la multinacional.
Precisamente esta misma semana la oficina presidencial de Ucrania confirmo mediante un comunicado que «Volodymyr Zelensky ha ordenado que todos los eventos internacionales que lo involucren programados para los próximos días sean pospuestos y se coordinen nuevas fechas». Algo que evidencia la compleja situación del país, en un momento en que Rusia parece tomar una ventaja más clara.