Mientras Joe Biden se preparaba para dejar el cargo, sus últimas apariciones públicas reflejaron una mezcla de nostalgia y frustración. Durante su última gira por la ciudad, con discursos de despedida ante el cuerpo diplomático y los líderes militares, se hizo evidente que la conclusión de su carrera no es la que había imaginado, tras cinco décadas en el servicio público.
Biden, quien asumió la presidencia en un momento de profunda polarización política, se va con el pesar de que su mandato ha terminado antes de lo que esperaba. El que ahora será expresidente siente que aún tenía más por aportar. Sin embargo, la incertidumbre sobre su salud y capacidad para continuar liderando determinaron su pronta salida.
Pero la deteriorada salud de Biden, no es lo único que ha dado de qué hablar. La relación con su sucesora, la vicepresidenta Kamala Harris, se ha vuelto tensa en estos últimos días. La distancia entre ellos podría complicar el futuro político de ambos, especialmente en un contexto donde Biden deja la Casa Blanca en un ambiente enrarecido por el regreso de Donald Trump, su archirrival. En vez de ser recordado como el presidente que puso fin a la era Trump, Biden se siente atrapado en un ciclo que parece haberle superado.
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Joe Biden: Logros y desaciertos
Durante su mandato, Biden enfrentó varios desafíos significativos. La pandemia de COVID-19 marcó su administración, y aunque logró implementar medidas para sacar al país adelante, el aumento de la inflación ha empañado su éxito. Su enfoque en la inmigración también fue problemático; ya que aunque buscó desmantelar políticas de la era Trump, el incremento de cruces ilegales generó críticas en su propia base.
Su decisión de finalizar la guerra en Afganistán fue un hito, pero la manera caótica en que se llevó a cabo la retirada dejó a muchos cuestionando su capacidad de liderazgo. Además, aunque trabajó para restablecer alianzas internacionales tras la invasión rusa a Ucrania, la guerra continúa sin un desenlace claro
A pesar de estos retos, Biden logró avances en infraestructura y manufactura, creando miles de empleos. Sin embargo, él mismo reconoce que los frutos de sus políticas no se verán de inmediato. En su discurso de despedida enfatizó que “las semillas están plantadas” para un futuro mejor, pero la paciencia de los ciudadanos podría estar agotándose.
Joseph Robinette Biden Jr., quien llegó a Washington como el senador más joven en 1972, se va como el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos. Su legado, según sus asesores, podría ser reevaluado con el tiempo, a medida que las políticas implementadas comiencen a dar resultados. Sin embargo, su capacidad de comunicarse efectivamente fue un objeto de críticas, y hay quienes creen que una salida anticipada podría haber beneficiado a su partido en lugar de extender su mandato.
