Sean ‘Diddy’ Combs, el icónico rapero y productor musical, se enfrenta a una serie de graves acusaciones que incluyen trata de personas y crimen organizado. Tras meses de rumores y escándalos, el juez Arun Subramanian fijó la fecha del juicio para el 5 de mayo de 2025. Esta decisión se produjo durante una reciente audiencia preliminar donde Combs, que permaneció en prisión desde su arresto el 16 de septiembre en Nueva York, buscó defenderse de múltiples cargos que podrían marcar un antes y un después en su carrera.
En la audiencia reciente, los abogados de Combs presentaron una moción para investigar las acciones del gobierno, alegando que se había orquestado una campaña de desprestigio contra él. Según los documentos, el equipo legal sostiene que la filtración de un video de 2016, donde Combs supuestamente agredía a su ex pareja Cassie Ventura, fue una táctica del gobierno para socavar su derecho a un juicio justo. Los letrados afirmaron que ni Ventura ni un tercero pudieron haber sido la fuente de la filtración, sugiriendo la responsabilidad del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Los fiscales, por su parte, han negado cualquier implicación en la difusión del video, afirmando que no tenían acceso al mismo antes de su publicación. Además, refutaron las alegaciones de que las redadas en las propiedades de Combs en marzo de 2024, donde supuestamente su familia sufrió varios maltratos, fueran parte de un plan para dañar su reputación.
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Sean ‘Diddy’ Combs: Legado en peligro
Las acusaciones que enfrenta Combs son alarmantes y abarcan diversos comportamientos violentos y abusivos hacia mujeres. Se le acusa de organizar fiestas donde las participantes eran forzadas a tener relaciones sexuales bajo coerción y de haber estado involucrado en un secuestro a mano armada y un incendio intencionado en 2011.
Cassie Ventura, quien fue víctima de la agresión en el video, habló sobre su experiencia, destacando la violencia doméstica como un problema serio. Debido a esto, en una publicación eliminada, Combs se disculpó por sus acciones, asumiendo la responsabilidad por lo sucedido en el video. Con el juicio programado para 2025, la atención mediática y el interés público en este caso continúan creciendo, mientras el futuro de Combs pende de un hilo en medio de un escándalo que podría redefinir su legado.
