La historia se repite en Estados Unidos. Primero lo intentó Hillary Clinton y perdió frente al entonces “outsider” de la política, Donald Trump. Casi 10 años después Kamala Harris buscó el sueño, pero el resultado fue igual: una derrota frente al magnate republicano, con lo cual el famoso techo de cristal queda intacto.
Kamala Harris llegó al juego casi por accidente. La flamante vicepresidenta vino al rescate del Partido Demócrata en medio de la debacle del todavía presidente Joe Biden, que recibió el KO definitivo en el primer y único debate electoral que sostuvo con Trump. En este contexto la presencia de Harris fue, sin dudas, “revolucionaria”.
La exfiscal ofreció aire fresco a una campaña marcada por la disputa entre dos hombres blancos, mayores de 75 años. Rápidamente movió sus fichas, consiguió los apoyos necesarios al interior de su partido, y tuvo un inicio trepidante, con recaudaciones millonarias en tiempo record. Aún así, ese empuje inicial solo le alcanzó para la ilusión de un “empate técnico”.
Harris arrastró la sombra de su posición como segunda en una administración muy cuestionada por los votantes. Además, se mostró más que débil en dos temas centrales para los norteamericanos: la frontera y la economía. A todo eso se sumó sus raras y escasas apariciones en los medios de prensa, que la mostraron incapaz de articular un discurso coherente ante preguntas complejas.
«Biden ha sido un presidente nefasto y Kamala Harris una vicepresidenta inútil que llegó hasta aquí sin ni siquiera ser capaz de ganar unas primarias demócratas. No es que EEUU sea ultraderechista, que también, es que os venden toneladas de propaganda a diario sobre este país». Así «resumió» en X la corresponsal de RT en Washington, Helena Villar.
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Kamala Harris y el sabor de la derrota
Harris no hizo una mala campaña, sobre todo si se tienen en cuenta sus exiguos índices de popularidad antes de iniciar el camino. Pero para ella, acostumbrada ya a los hitos, la derrota es, quizás, más dolorosa. Con 60 años es cierto que tiene tiempo para un nuevo intento, pero la realidad es que es algo poco probable. Por lo tanto, solo resta por ver si tras este resultado asume un perfil más bajo, o decide mantenerse en las primeras líneas de su partido.
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— News18 (@CNNnews18) November 6, 2024