A Donald Trump y a Kamala Harris no les queda tiempo para más. Este cinco de noviembre Estados Unidos elegirá entre ambos candidatos al presidente de la nación por los próximos cuatro años y, si bien las encuestas hablan de las elecciones más reñidas de la historia, el magnate republicano parece en mejor posición.
Kamala Harris tuvo un inicio de campaña arrollador. En su camino consiguió impresionantes recaudaciones de fondos y ha recibido el respaldo de grandes personalidades de la industria del entretenimiento. La mesura, la ecuanimidad y la alegria han sido sus cartas de presentación más habituales, y le han rendido frutos.
Sin embargo -lo saben ella y su equipo- esto no es suficiente para ganar una elección presidencial. Máxime cuando el rival es Donald Trump. Quizás por eso “Harris está empezando a adoptar actos más espontáneos (…) y dio el raro paso de responder preguntas en el programa de radio estilo “foro comunitario”, reseñó un artículo de CNN.
Te puede interesar: Estados Unidos: Donald Trump arremetió contra Kamala Harris
Kamala Harris de cara al 5 de noviembre
Harris es consciente de que con lo que tiene ahora, no le alcanza. Pero lo cierto es que, a estas alturas, ya hasta el tiempo juega en su contra. A la vicepresidenta “le pesa”, además, el cargo que ha ocupado durante casi cuatro años. Los votantes creen que en ese tiempo pudo hacer más, y no lo hizo. Más bien se dedicó a diluirse y a esconderse de la prensa.
“Con Trump tratando de reparar su déficit entre las mujeres y Harris tardíamente tratando de apuntalar el apoyo entre los hombres negros, la batalla por el puesto político más poderoso del mundo se parece menos a una prueba de fuerza que a una lucha entre dos candidatos que saben que mitigar sus debilidades puede ser la clave de la victoria”, analizó la multinacional noticiosa.
Black men deserve a president who cares about making their lives better. pic.twitter.com/cUCdsvvYZ6
— Kamala Harris (@KamalaHarris) October 15, 2024