Los seis años de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como presidente de México han estado marcados -sin muchas dudas- por un impresionante apoyo popular. Algo que se evidenció durante su último informe de Gobierno, que reunió en el Zócalo de Ciudad de México a cientos de miles de simpatizantes
“Hoy rindo ante ustedes y ante el pueblo y la nación mi último informe de Gobierno, y lo hago más convencido que nunca de que lo mejor de México es su pueblo, heredero de civilizaciones, que florecieron desde mucho antes de la llegada de los invasores europeos”, destacó el pasado 1ro de Septiembre.
Su sexenio al frente del país azteca no ha sido un camino de rosas, básicamente, porque ninguna presidencia lo es. Máxime, en un país con tantos desafíos. En este sentido, el final de su recorrido no ha sido la excepción. La crisis en Venezuela, la captura de El Mayo Zambada y la polémica Reforma Judicial han marcado sus últimos meses como Jefe de Estado.
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México ¿Qué hay detrás de la Reforma Judicial?
“Toda la atención está centrada en la reforma al Poder Judicial, una de las máximas prioridades del aún presidente. El plan contempla elegir a jueces, ministros y magistrados por voto popular, crear un órgano de control desligado de la Corte Suprema, reducir el tamaño del máximo tribunal del país y acotar los tiempos establecidos para resolver casos fiscales y penales”. Así resume BBC Mundo una propuesta que ha sido criticada dentro y fuera de las fronteras mexicanas.
“El problema consiste en la pérdida de independencia de los juzgadores y es evidente que las listas que patrocine el presidente y la mayoría parlamentaria que le es afín serán las que tengan mayores posibilidades de éxito, lo que se traducirá en un quebrantamiento del Estado de derecho en el país”, dijo a CNN el doctor en derecho Diego Valadés.
De igual manera, un informe del Diálogo Interamericano, think tank con sede en Washington, y la Universidad de Stanford advirtió que los cambios son “una amenaza directa a la independencia judicial, ponen en peligro los derechos de las minorías y son contrarias a los estándares internacionales sobre la independencia e imparcialidad del poder judicial”.
Cualquiera que siga el funcionamiento de un Tribunal Constitucional sabe que el juez actuando desde la centralidad es, en el mejor de los casos, una linda teoría con malos ejemplos. https://t.co/OwOykMB9dP
— Gatopardo (@Gatopardocom) September 5, 2024