65 años de la “Revolución Cubana” han demostrado que este sistema es insostenible. La gestión gubernamental de la isla, primero a cargo de Fidel Castro y ahora en manos de “la continuidad”, han llevado al país a un fondo del que resulta muy difícil salir. Las noticias de Cuba así lo han remarcado en los últimos años, en los cuales los índices de pobreza y marginalidad aumentan, la crisis económica y social se extrema y a la par, el gobierno sigue vendiendo su imagen heroica al mundo.
La falta de comida, la ineficiencia del sistema de salud, el acenso de la violencia y el vandalismo y recientemente el colapso del Sistema Electroenergético Nacional son los últimos síntomas de una nación que agoniza. Y esta no se trata de una idea plantada por “los odiadores”, como replican los medios oficialistas. Es un sentimiento generalizado entre la población y los cubanos que aún fuera de la isla la sienten suya.
También es un precepto compartido por el gremio especializado. Recientemente los politólogos Alina Bárbara López Hernández y Manuel Cuesta Morúa refirieron que el sistema cubano ya no tiene bases económicas en las que sustentarse. Ello solo deja margen para que el futuro de la nación recaiga obligatoriamente en un cambio estructural. Uno que dependerá, según acotaron los expertos, de la voluntad del pueblo.
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Noticias de Cuba: un país que se cae a pedazos
Durante una presentación en la Conferencia Latinoamericana de Periodismo de Investigación (COLPIN), López Hernández recalcó que lo ocurrido en las últimas jornadas dejó claro que el Estado no tiene la posibilidad de responder o auxiliar al pueblo ante una situación de desastre. Sin embargo, en medio de la crisis humanitaria, agentes de la seguridad continuaban limitando el trabajo de los periodistas independientes para tratar de “controlar” la realidad que pudiera ver el mundo.
Este ejemplo denota claramente dónde reside la verdadera prioridad de la jefatura del país. Las noticias de Cuba se han hecho eco de los cuestionamientos ante la pésima gestión de los fondos de inversión, que han obviado al precario sistema eléctrico en beneficio del impulso a la industria del turismo. Por otro lado, López Hernández destacó que es notorio el miedo del gobierno a “asumir un proceso de transición que dé participación a la ciudadanía”.
“Cuba está rota, su tejido está fragmentado. Desde la economía, sus valores hasta la legitimidad de sus autoridades”. De esta forma resumió el contexto actual el experto Manuel Cuesta. En tanto señaló que aún persiste el optimismo en un cambio sustancial debido al espíritu emprendedor del pueblo y su veloz autodemocratización.
