Los problemas crónicos que aquejan al sistema de racionamiento alimentario del gobierno cubano han alcanzado un nuevo punto crítico, según lo reportan las últimas noticias de Cuba. Tras años de promesas incumplidas, la población se encuentra cada vez más frustrada ante la creciente escasez e irregularidad en la distribución de los productos básicos.
Un informe presentado recientemente ante la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) por la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, reconoció abiertamente las severas afectaciones en el abastecimiento de la canasta normada durante el 2023 y el primer trimestre de 2024. Artículos como frijoles, azúcar, aceite, café, pollo, carnes y combustibles domésticos han sufrido recurrentes déficits y demoras en su entrega.
Según el sitio web oficialista Cubadebate, que dio a conocer los detalles de la «rendición de cuentas» ministerial, las dificultades financieras han provocado un «fraccionamiento en las entregas a la red minorista», impidiendo que se cumplan las coberturas necesarias y la oportunidad en la recepción de estos productos primordiales.
Esta realidad se traduce en constantes atrasos y, en muchos casos, la completa ausencia de artículos en las bodegas y mercados locales, generando un creciente malestar entre los ciudadanos cubanos, quienes ven cómo el sistema de racionamiento, considerado históricamente una conquista de la Revolución, se derrumba.
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Noticias de Cuba: Promesas vacías
La ministra Díaz Velázquez reconoció que su ministerio no ha podido cumplir con todos los compromisos establecidos, pero aseguró que harán esfuerzos para mejorar la situación en lo que resta del año. Sin embargo, estas promesas han sido reiteradas en el pasado sin lograr resultados tangibles.
Por su parte, el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, argumentó que la canasta normada, «a pesar de sus insuficiencias, es una conquista que se mantendrá», justificando que la mayoría de los productos deben importarse, lo cual representa una prioridad para la asignación de divisas.
No obstante, las denuncias de retrasos y faltantes en la entrega de la canasta normada continúan siendo frecuentes en las redes sociales, reflejando el creciente descontento de la población. Incluso a inicios de julio, se reportó que los pobladores de Holguín recibieron recién el arroz que les debían desde junio, una situación similar a la vivida en otras regiones del país.
Esta crisis del sistema de racionamiento se acentuó durante el 2022, debido a la dramática caída en la producción nacional de alimentos básicos, lo que incrementó la dependencia de las importaciones. Ahora, el gobierno cubano enfrenta la difícil tarea de frenar el deterioro de un pilar fundamental de su modelo socioeconómico, en medio de un creciente malestar social.