Históricamente, las noticias de Cuba han presentado una narrativa que, a menudo, ha vendido una realidad distorsionada respecto al embargo establecido por Estados Unidos. Este embargo, considerado por muchos en la isla como una medida injusta, ha sido retratado como el principal responsable de los problemas económicos y sociales en el país. Sin embargo, no se puede obviar la otra cara de la moneda.
El «bloqueo», que comenzó en 1959 con la llegada de Fidel Castro al poder, es también una respuesta a las sistemáticas violaciones de derechos humanos perpetradas por el régimen cubano. Cada administración estadounidense ha ajustado su enfoque, desde Eisenhower hasta Trump, en función de la represión creciente que se observa en la isla.
Desde su origen bajo la presidencia de Dwight Eisenhower, el embargo fue un recurso diplomático que se diseñó para disuadir la represión ilegal ordenada por los líderes comunistas. Por lo que, los años de violencia y control del estado cubano, han llevado a Washington a replicar este instrumento actualmente con severas sanciones económicas. Afectando así, incluso a terceros países.
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Noticias de Cuba: Un régimen de represión
Recientes informes de organizaciones como Prisoners Defenders han revelado que hay más de 1,100 prisioneros políticos en Cuba. Un reflejo alarmante de la falta de libertades fundamentales. En el último año, se han sumado 180 nuevos casos, lo que indica un incremento en la represión y el control estatal.
La represión en Cuba no solo se manifiesta en la encarcelación de disidentes, sino también en torturas, censura mediática y la negación de derechos laborales. A pesar de la crisis económica, la población vive bajo un estricto control que limita cualquier reacción colectiva, perpetuando así el régimen.
Además, el régimen ha fortalecido sus lazos con potencias como China, Rusia e Irán, lo que complica aún más la situación. La reciente votación en la Asamblea General de la ONU, donde solo Estados Unidos e Israel se opusieron al levantamiento del embargo, pone de manifiesto la complejidad geopolítica que rodea a Cuba.
Por ello, si bien el embargo es visto por muchos como una medida punitiva, es fundamental reconocer que su origen radica en la necesidad de responder a un régimen que viola sistemáticamente los derechos humanos. La discusión sobre este «bloqueo» no puede estar aislada de la realidad interna de Cuba, que sigue siendo un tema crucial en el debate internacional.