Las noticias de Cuba resaltan que el más reciente informe de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) detalló las inversiones del gobierno en el primer semestre de 2024. Un reporte que viene a confirmar algo sabido por expertos y pueblo en general: la gestión de estos capitales no se acaba de concentrar en donde realmente hace falta.
Según el economista Pedro Monreal, hay una “persistencia de una estructura muy deformada de la inversión en Cuba en la que casi el 40 por ciento se concentra en actividades articuladas alrededor del turismo”. Pese a que el índice de ocupación en los hoteles no ascendió ni siquiera al 30 por ciento el pasado año y en este solo llega al 35%, las inversiones en el componente hoteles y restaurantes sigue creciendo.
En tanto, la industria azucarera, que antaño tan buenos resultados dio, hoy no es solo una de las más deprimidas, sino que además, ocupa uno de los últimos escaños en la lista de intereses para invertir. Ello mientras la disponibilidad del azúcar no alcanza siquiera para el consumo básico de la población y las zafras azucareras exhiben sus peores cifras en más de 100 años.
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Noticias de Cuba: continúa la apuesta a ciegas al turismo
Similar situación se aprecia en la industria alimentaria. Más allá de las campañas televisivas remarcado la prioridad de la seguridad y soberanía alimentaria, el sector no recibe realmente la atención que amerita. Monreal subrayó que el reducido peso relativo de la inversión en este rubro, solo un 2, 5 de la total, indica que, en efecto, la “prioridad” no pasa de ser una consigna.
Por otro lado el experto apuntó que “el predominio de las inversiones asociadas al turismo supera la inversión combinada entre la industria manufactura y el sector agropecuario”. Las noticias de Cuba han destacado en incontables ocasiones el peso de estos dos sectores para el desarrollo de la productividad del país y por ende, si no se avanza en ellos, la idea repetida hasta el cansancio por los funcionarios estatales de “impulsar la economía” es casi imposible.
Cabría entonces preguntarse a qué responde el ilógico interés gubernamental de seguir apostando por el turismo cuando es evidente que no está dando resultado. Es esta una muestra más de que la agenda de «los jefes» no tiene como primer punto el bienestar del pueblo.