Miles de personas se congregaron en el Times Square de Nueva York para presenciar la emblemática bajada de la bola de Año Nuevo. A ellas se «sumaron» millones en todo el mundo que observaban desde la distancia.
A principios de la pasada semana los enormes números «2024» fueron izados en lo alto del edificio One Times Square. La famosa bola, de casi 12000 libras, recibió una renovación con pajarita, que añadía un toque festivo a la celebración.
Los neoyorkinos y los turistas escribieron sus deseos para el nuevo año en pedazos de confeti. Luego, estos cayeron como una lluvia festiva para dar la bienvenida al 2024. Algunos aprovecharon, además, para despedirse de las cosas que deseaban dejar atrás.
La ciudad se preparó para recibir a un millón de personas, deseosas de presenciar el descenso de la bola. Mientras que se esperaba que mil millones más sintonizaran el evento a través de la televisión. A medianoche, la bola descendió en Times Square marcando el inicio de los fuegos artificiales y las celebraciones en todo el país.
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¿Cómo surge esta famosa celebración?
Esta tradición se originó en 1904 cuando Jacob Starr, obrero metalúrgico, y el editor del New York Times, Adolph Ochs, colaboraron para crear una atracción visual que celebrara el Año Nuevo. Originalmente Ochs había utilizado fuegos artificiales para atraer a multitudes al edificio del periódico, pero debido a la prohibición de explosivos, se necesitaba una alternativa.
Starr, quien trabajaba en una empresa de letreros, fue encargado de crear una nueva pantalla visual. Se inspiró en los dispositivos náuticos llamados «bolas de tiempo» que se utilizaban en el siglo XIX para sincronizar los cronómetros de los barcos. Estas bolas de metal se bajaban y subían todos los días en puertos y observatorios, para que los marineros ajustaran sus instrumentos.
La idea de bajar una bola iluminada con los números del año nuevo a la medianoche fue atribuida tanto a Ochs como al electricista jefe del New York Times, Walter Palmer. Sin embargo, la nieta de Starr afirma que fue su abuelo el de la iniciativa. El objetivo era utilizar la nueva electricidad que había llegado al vecindario y crear un espectáculo visual impactante.
Una tradición que evoluciona
La tradicional bajada de la bola en Times Square es una de las celebraciones más emblemáticas en Estados Unidos. A lo largo de los años, la bola ha evolucionado en diseño y tecnología. En la actualidad está compuesta por paneles de cristal de Waterford Crystal. Además, cuenta con tecnología LED de última generación.
La celebración de Año Nuevo en Times Square ha capturado el entusiasmo de personas de todo el mundo. Hoy es un símbolo de esperanza, renovación y unión. Además, una de las formas más emblemáticas de dar la bienvenida al nuevo año.
