En diciembre de 1933 una pequeña niña de apenas 5 años de edad, Shirley Temple, firmó un contrato con el estudio Fox, que se encontraba al borde de la quiebra. Lo que surgió de esta acción fue una ascendente carrera que no solo convirtió a Temple en una superestrella, sino que también resucitó la fortuna del estudio, convirtiéndolo en 20th Century Fox.
Cuando el mundo se sumergía en la Gran Depresión, Fox Studios operaba con pérdidas y debía millones de dólares, con el precio de sus acciones desplomado. Fue entonces cuando la joven Temple llegó al rescate, protagonizando pequeños papeles en películas como «¡Seamos optimistas!», donde se destacó junto al actor James Dunn.
Tras su impresionante debut, a Temple le ofrecieron un contrato de un año con una posible extensión de siete, con un salario semanal de $150. Pero el impacto de Temple en Fox Studios fue tan inmediato, que su carrera despegó rápidamente, con éxitos como «Baby, Take a Bow» y «Ojos cariñosos». Desde entonces su talento, carisma y popularidad no solo la convirtieron en la estrella mejor pagada de Hollywood, sino que también salvaron a Fox Studios de la quiebra, asegurando su transición a 20th Century Fox.
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Todo no fue color de rosa para Shirley Temple
A lo largo de su carrera, Temple protagonizó numerosas películas icónicas que la convirtieron en una de las estrellas más queridas de su tiempo. Su talento, carisma y dedicación la llevaron a recibir el primer premio juvenil de la Academia en los premios Oscar de 1935, un logro notable que sigue siendo recordado en la historia del cine como un hito en la carrera de una niña prodigio que conquistó Hollywood.
Sin embargo, tal y como la propia Temple reflejó en una entrevista con la BBC en 1989, la dureza y disciplina eran parte inherente de su labor desde una edad temprana: «La lección que me enseñaron es que ‘el tiempo es dinero’ y que ‘es trabajo, no juego’. Y eso lo aprendí antes de convertirme en estrella».
A pesar de los logros que cosechó en la pantalla grande, Temple tuvo que enfrentar desafíos económicos en su vida adulta, ya que la mayor parte de su cuantiosa fortuna se había esfumado con el paso del tiempo. No obstante, su legado como salvadora de los Fox Studios perdura como un hito histórico en la industria cinematográfica.
Shirley Temple posing by a painting of herself
— ClassicMovieDigest (@ClassicMovieDig) November 23, 2023
as a young child, 1945 pic.twitter.com/1NGRol1Y6M
