Este jueves el estado de Alabama, en Los Estados Unidos, fue sacudido por su primer terremoto del 2024. El fenómeno ocurrió sobre las 4 y 20 de la mañana y tuvo una magnitud de 2.3 grados.
No obstante, de acuerdo con el United States Geological Survey, no hay reportes ciudadanos de la percepción del sismo. Ello, aun cuando tuvo un alcance de 11 millas. La razón, según expertos, es porque lo común es que las personas sientan el temblor cuando la magnitud del sismo es de 2, 5 o mayor.
Los reportes de daños son mínimos, ubicados específicamente en las cercanías de las comunidades de Fort Payne y Valley Head. La mayoría de las afectaciones la constituyeron ventanas rotas. En esta área no son comunes los sismos. Cuando ocurren, casi siempre son de baja magnitud y sin grandes peligros para la vida o los recursos.
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Estados Unidos: La «suerte» de Alabama
La ubicación del estado de Alabama no la hace muy susceptible a los terremotos. Los que ocurren en la zona norte están asociados al área sísmica Southern Appalachian. En tanto, los que impactan la zona sur guardan relación con el área sísmica Bahamas Fracture.
De acuerdo con los registros, el terremoto de mayor intensidad ocurrido en la zona norte de Alabama, fue el 29 de abril de 2023. Tuvo una magnitud de 4.6 grados y, aunque su epicentro fue localizado cerca de DeSoto State Park, se sintió mucho más al sureste de los Estados Unidos. Igualmente, fue percibido por un aproximado de 17 mil personas.
Sin embargo, en la historia de los Estados Unidos sí se han reportado sismos de una magnitud alarmante. El más peligroso de estos ocurrió en Alaska en marzo de 1964. Tuvo una magnitud de 9,2 grados y se considera aún el segundo terremoto de mayor intensidad registrado en el mundo, solo superado por el ocurrido en 1960 en Chile, de 9, 5 grados.