Tras una relación marcada por altibajos y momentos públicos de gran intensidad, Jennifer López y Ben Affleck han finalizado oficialmente su proceso de divorcio, según documentos judiciales obtenidos por People. La resolución de esta unión, que tuvo su punto de quiebre en abril de 2024, ha sido formalizada con acuerdos sobre la división de bienes y obligaciones, aunque aún restan por determinar propiedades y activos específicos.
Inmersos en un romance que revivió en 2021, la pareja contrajo matrimonio en una ceremonia íntima en Las Vegas en julio de 2022, seguida de una boda más formal en Georgia en agosto de ese mismo año. Sin embargo, el 20 de agosto de 2024, Jennifer López presentó la solicitud de divorcio en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles, citando «diferencias irreconciliables» y estableciendo el 26 de abril como la fecha de su separación.
En su solicitud, López pidió la restauración de su apellido de soltera, Jennifer Lynn López, y renunció a la manutención conyugal y a los honorarios legales para ambas partes, dejando los detalles exactos de sus bienes y obligaciones para determinar en una etapa posterior.
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¿Cómo ha sido el divorcio para Jennifer López y Ben Affleck?
Si bien la decisión de divorciarse vino de la actriz, fuentes cercanas revelaron que López no deseaba inicialmente la separación. No obstante también afirmaron que experimentó un sentimiento de alivio tras concretar la solicitud. Por su parte, Ben Affleck parecía estar enfocado en su trabajo y en su familia, manteniendo una actitud positiva hacia el futuro.
Ahora que el final de su relación es oficial, Jennifer López reflexionó sobre los desafíos que ha enfrentado en medio de su proceso de divorcio y las lecciones que ha aprendido de estas experiencias. De acuerdo a sus palabras, López ha aprendido a valorar su capacidad de sentir «alegría y felicidad» por sí misma, y a ver los desafíos como oportunidades de crecimiento personal.
A pesar del final de su relación romántica, Jennifer López y Ben Affleck han mantenido una relación cordial y continúan como una familia unida en apoyo a sus hijos. Ambos siguen en contacto para manejar los asuntos relacionados con la crianza, sin que esto implique la reanudación de una relación sentimental.
